La crisis de Silicon Valley arrastra a las acciones bancarias
Las preocupaciones sobre lo que se avecina llevó a Wall Street a cerrar la mayoría de acciones a la baja, aunque otras acciones como las tecnológicas lograron evitar la crisis y cerraron con saldo positivo.
Las acciones del sector bancario se desplomaron en la jornada del lunes en la mayoría de los mercados del mundo como consecuencia de la quiebra e intervención del Silicon Valley Bank en Estados Unidos. Ante el temor a que otra entidades enfrenten problemas similares y obliguen a las autoridades a salir al rescate de los depósitos de los ahorristas.
Esto disparó la crítica de los inversores contra la Reserva Federal (FED) por falta de control y supervisión para evitar una debacle financiera.
Ante este panorama y luego de que las autoridades lanzaron un paquete de medidas para asegurar la devolución de los depósitos a los ahorristas, la FED anunció que el vicepresidente de Supervisión, Michael Barr, tendrá a su cargo la revisión de la supervisión y regulación de Silicon Valley Bank, y que los resultados del relevamiento que llevará a cabo se dará a conocer el 1° de mayo.
Quien hizo alusión del tema fue el presidente de la FED, Jerome Powell, quien afirmó que "los acontecimientos que rodean a Silicon Valley Bank “(SVB) exigen una revisión exhaustiva, transparente y rápida por parte de la Reserva Federal”.
En este contexto, Wall Street cerró ayer con ligeras pérdidas aunque otras acciones como las tecnológicas lograron surfear la crisis y cerraron en números positivos ya que creen que la FED no adoptará una postura agresiva en lo que respecta a las tasas de interés.
Las caídas más fuertes nuevamente provinieron de los bancos y otras compañías financieras. A los inversores les preocupa que un aumento fuerte de las tasas de interés, con la cual se trata de controlar la inflación, se esté acercando a un punto de inflexión y pueda estar resquebrajando el sistema bancario.
Pero las críticas sobre los canales de supervisión no solo se centran sobre la FED, sino también sobre los auditores externos del SVB y otras entidades financieras en problemas, poniendo en juego el prestigio de las denominadas “Big Four”, las cuatro grandes firmas de auditoría contable que dan el visto bueno a los balances de las entidades financieras.