La Marilyn a la que retrataron, cada uno a su manera, Norman Mailer, en la biografía de la actriz que publicó en 1973 (11 años después de su muerte), y el fotógrafo Bert Stern unas semanas antes de su muerte en la famosa sesión 'Last sitting' para la revista 'Vogue'. Ahora, los dos trabajos aparecen por primera vez reunidos en un solo volumen, llamado 'Marilyn Monroe' y editado por la editorial Taschen en dos ediciones muy limitadas.

El texto de Mailer, descatalogado desde hace años, fue uno de los libros más vendidos en la carrera del escritor estadounidense. También, uno de los más polémicos. En sus páginas, alimentadas por la serie de entrevistas que Mailer sostuvo con Monroe, la actriz cuenta detalles muy íntimos y muy dolorosos de su vida. Tan dolorosos, que el escritor Arthur Miller, antiguo marido de la actriz, descalificó el trabajo de Mailer y dijo que Monroe, en realidad, había interpretado un papel para complacer a su biógrafo.

Las fotografías de Bern Stern, mientras, están en la mente de casi todos. Sus retratos muestran a Marilyn Monroe a los 36 años, más delgada, más o menos desnuda y muy atractiva... de una manera que parece contradecir la imagen que el mundo había tenido de la actriz de 'Ellos las prefieren rubias'. Parecía el presagio de una nueva Marilyn Monroe que nunca llegó a fraguar. Dos semanas después de la sesión, la actriz apareció muerta. En la biografía de Mailer, por cierto, se da crédito a la teoría de que fue asesinada.