El jefe máximo de las FARC, Guillermo Sáenz, alias Alfonso Cano, murió este fin de semana tras un bombardeo a su campamento por parte de las fuerzas militares de Colombia, confirmó el presidente Juan Manuel Santos. Para el jefe de Estado, fue el “golpe más contundente” dado en toda la historia contra la mayor organización guerrillera del país.

Cano cayó abatido en un bombardeo lanzado a su campamento en una zona rural del municipio Suárez, en el departamento (provincia) Cauca, en el sur del país. El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, informó que el operativo contra Cano se inició “hace varios días, bajo el nombre de Odiseo, pero se materializó a las 8.30 del día de hoy” (por ayer) con un bombardeo en el que, según confirmó, cayeron varios de los miembros del “anillo de seguridad” del líder guerrillero.

Luego, las tropas desembarcaron en la zona, hallaron varios elementos que les permitieron concluir que estaban tras la pista de Cano, a quien siguieron y que cayó abatido luego de un enfrentamiento con los soldados, señaló por Continental Malu Fernández, periodista de Caracol Colombia.