Ex jefe de la oficina anti-corrupción china confesó haber recibido 33 millones de dólares en sobornos
Liu Yanping, de 67 años, está acusado de recibir dinero a cambio de favores comerciales, sentencias indulgentes, promociones laborales y ayuda para obtener placas de automóviles restringidas.
Liu Yanping, ex jefe de la oficina anti-corrupción de la agencia nacional de espionaje del régimen de China, se declaró culpable de haber aceptado sobornos durante su gestión. El ex funcionario de 67 años estaba acusado de aceptar más de 234 millones de yuanes (33 millones de dólares).
El juicio se llevó a cabo este jueves ante el Tribunal Popular Intermedio de Changchun, en la provincia nororiental de Jilin. Ahí Liu, quien ejerció como jefe disciplinario del Ministerio de Seguridad del Estado, se declaró culpable y expresó su arrepentimiento.
La Justicia China aseguró que, tras declarase culpable, se levantó la sesión del tribunal y se espera que en los próximos días pueda ser sentenciado, según publicó el medio South China Morning Post.
De acuerdo con la cadena estatal CCTV a principios del 2022, Liu había sido acusado por el ex viceministro de seguridad pública, Sun Lijun, por deslealtad al líder del Paritdo Comunista Chino y jefe de Estado del país, Xi Jinping. El ex miembro del régimen chino fue señalado por recibir dinero a cambio de favores comerciales, sentencias indulgentes, promociones laborales y ayuda para obtener placas de automóviles restringidas, confirmó South China Morning Post.
De igual manera, el tribunal también señaló que los antecedentes de corrupción de Liu se remontan a 2001, cuando se desempeñaba como subdirector de la oficina de seguridad del Ministerio de Seguridad Pública, y era el responsable de proteger a los principales líderes del país. Aparentemente, el funcionario continuó aceptando sobornos cuando se convirtió en jefe de la oficina, y después como jefe disciplinario del Ministerio de Seguridad del Estado.
En septiembre de este año, el Partido Comunista de China lo expulsó de sus filas por “abuso de poder desenfrenado”, convirtiéndose en el último alto funcionario en caer en una amplia campaña contra la corrupción. De acuerdo con la Comisión Central de Control Disciplinario (CCDI) en un comunicado, Liu “participó en la pandilla política de Sun Lijun” y vivió un lujoso estilo de vida de golf y banquetes.