El presidente de Francia, el socialista Francois Hollande, calificó como "un verdadero atentado terrorista" el ataque de esta mañana a la sede del semanario satírico Charlie Hebdo en París, que dejo como saldo, al menos 12 muertos y una veintena de heridos.

"Es un verdadero atentado terrorista", expresó Hollande al llegar a la sede de Charlie Hebdo y agregó: "Es un acto de barbarie contra este periódico y los periodistas y policías que fueron asesinados cobardemente".

Hollande, quien esta noche (hora francesa) hablará por televisión, aseguró que "varios atentados habían sido desactivados en las ultimas semanas".

A las 11.30, dos personas encapuchadas, vestidas de negro y fuertemente armadas ingresaron a la sede del semanario satírico Charlie Hebdo disparando con armas automáticas.

Los atacantes, que según testigos se retiraron gritando "Alá es grande" y "vengamos al profeta", lograron escapar en un automóvil negro que los esperaba a pocos metros. Antes, fusilaron a un policía en plena calle.

El ataque -el más mortífero del que Francia tenga recuerdo- dejo "al menos 12 muertos (dos policías) y una veintena de heridos", según informó el ministerio del interior francés, que minutos después elevó al plan antiterrorista Vigipirate a su nivel máximo: "alerta atentado".

Según la radio publica francesa France Info, los atacantes atropellaron a un peatón en su huida y asesinaron a otro policía.
Los efectivos franceses perdieron el rastro del auto y se especula con que los atacantes habrían cambiado de vehículo antes de dejar la capital francesa hacia el norte.

La sede de Charlie Hebdo, la redacción se encuentra en otro barrio parisino, poseía vigilancia policial especial luego de haber recibido fuertes amenazas de grupos islamistas por haber publicado caricaturas del profeta Mahoma.

La intervención militar francesa en Irak contra la agrupación Estado Islámico (EI) le valió a Francia reiteradas amenazas de EI, grupo que llamó a matar franceses en cualquier rincón del mundo.

A fines de septiembre, el alpinista Hervé Gourdel fue decapitado en Argelia por un grupo ligado a EI.

A fines de noviembre se registraron dos casos, que el gobierno endilgó a "desequilibrados mentales" y no a un ataque terrorista, donde al grito de 'Alá es grande', tres personas atropellaron e hirieron con sus autos a decenas de personas en Nantes y Dijon.