Hollande llamó a combatir al antisemitismo al recordar a las víctimas del holocausto
A 70 años de la liberación del campo de exterminio nazi de Auschwitz por el ejército ruso, el presidente condenó el resurgimiento de actos antisemitas.
Esta mañana, el Consejo representativo de las instituciones judías de Francia (Crif) denunció un fuerte incremento (+101%) de los actos antisemitas en Francia durante 2014.
Una estadística que se suma al crecimiento exponencial de los actos antimusulmanes luego del atentado a la revista Charlie Hebdo el 7 de enero.
"Desde hace años el antisemitismo es una realidad insoportable y una herida para nuestra República", aseguró esta mañana Hollande en el Memorial del Holocausto de París, en un discurso de media hora, poco antes de partir a Polonia para participar esta tarde junto a otros mandatarios europeos en un acto en Auschwitz.
"Francia nunca olvidará un crimen tan innoble que no tenía nombre", expresó Hollande en referencia a la Shoah tras recordar en París a los 78.000 judíos franceses deportados por el gobierno colaboracionista francés de Vichy durante la ocupación nazi de Francia en la Segunda Guerra Mundial.
"¿Cómo aceptar que en 2015 haya militares defendiendo los judíos de Francia?", se preguntó el mandatario socialista.
El 27 de enero de 1945, las tropas rusas -conocidas desde la revolución socialista de 1917 como Ejército Rojo- liberaron el campo de concentración de Auschwitz-Birkenau, en el sur de Polonia, donde murieron alrededor de 1.100.000 personas de diferentes países europeos, en su enorme mayoría de confesión judía.
Esta tarde, sobre los campos nevados donde se encontraba el centro de exterminio, Hollande -junto a otros Jefes de Estado y decenas de sobrevivientes del Holocausto- rendirán un homenaje a las víctimas en momentos en que el antisemitismo crece en Europa.
Según el Crif, que cita cifras del Servicio de protección de la comunidad judía (SPCJ), basados sobre informaciones del ministerio del Interior, 851 actos antisemitas se produjeron en Francia durante 2014, contra 423 en 2013.
Asimismo, el organismo judío alertó del alza de los actos de violencia física, que pasaron de 105 en 2013 a 241 en 2014.
"Estos actos antisemitas representan el 51% de los actos racistas cometidos en Francia el ultimo año, mientras los judíos representan el 1% de la población francesa", indica el comunicado del Crif.
Francia cuenta con la comunidad judía más importante de Europa (tercera en el mundo detrás de Israel y Estados Unidos), estimada entre 500.000 y 600.000 personas.
No obstante, en 2014 y por primera vez desde 1948, Francia se convirtió en el primer país de emigración judía hacia Israel, al pasar de 3.400 en 2013 a 6.000 el año último.
"El antisemitismo conduce a algunos judíos a interrogarse sobre su presencia en Francia. Ustedes, franceses de confesión judía, vuestro lugar es aquí. Francia es vuestra patria", lanzó Hollande.
El comunicado del Crfi tiene lugar pocos días después de que el Observatorio Nacional contra la Islamofobia denunciara que en dos semana se registraron en Francia casi tantos ataques y amenazas contra musulmanes o sus lugares de culto como en todo 2014.
Paralelamente, luego del atentado al semanario satírico Charlie Hebdo y el ataque a un supermercado kosher, que dejaron 20 muertos, incluyendo a los tres atacantes, los actos islamófobos crecieron exponencialmente en Francia.
Entre el 7 y el 20 de enero se registraron 128 agresiones o ataques a centros de culto.
En 2014, el mismo organismo, dependiente del Consejo francés de Culto Musulmán (CFCM), cifró en 133 los actos anti musulmanes en el país galo.
El registro del Observatorio se basa en las denuncias realizadas por musulmanes a la policía y la gendarmería.
El comunicado precisa que las denuncias fueron por 33 actos vandálicos a mezquitas y 95 amenazas e insultos contra practicante musulmanes franceses.
Se estima que cerca de cinco millones de musulmanes viven en Francia, constituyendo el 7% de la población del país y la comunidad islámica más grande de Europa.
Ambas comunidades engrosaron sus filas con inmigrantes de la antigua colonia Argelia.
Ya a mediados del siglo XIX Francia diferenció a los judíos argelinos del resto de la población, declarándolos ciudadanos franceses. En la década de 1960, tras la emancipación, la mayor parte de los judíos argelinos abandonó su tierra ancestral africana y engrosó la clase media francesa.
La inmigración musulmana, de un carácter ante todo económico, fue asentándose en las barriadas de clase trabajadora, y tendió a desempeñar los oficios peor remunerados, desplazando de ellos a sus pares europeos.