La ONU votó otro paso hacia un nuevo marco legal para la quiebra de países
La iniciativa presentada por Bolivia en representación del G77+China tuvo 128 votos, 4 más que en la resolución de septiembre. Timerman propondrá que haya negociaciones en enero.
Como reclamó en su momento la Argentina, la Asamblea de la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó un nuevo marco legal para la quiebra de países. La propuesta impulsada por el G77+China obtuvo incluso más votos que en la reunión del 9 de septiembre pasado. La votación se abocó a los aspectos previos al inicio formal de la discusión del futuro marco regulatorio, que tendrá a su cargo definir la metodología para la resolución de deudas soberanas.
Hubo 128 votos de países miembros de Naciones Unidas, cuando en la asamblea del 9 de septiembre habían sido 124. Antes de la votación, el representante de Estados Unidos pidió la palabra para explicar su posición en contra de la propuesta, cosa que hizo en duros términos. Luego, pidieron la palabra Sudan, Egipto e India, además de la Argentina, que estuvo representada por la delegada ante Naciones Unidas, Marita Perceval.
Según distintos relevamientos, los países de América latina y África acumulan 106 juicios contra los holdouts desde mediados de los 70 hasta la fecha. Y ya hay abogados internacionales que advierten que por el fallo de Griesa, los fondos buitre están acelerando su vuelo rapaz para adquirir más deuda vieja "no protegida".
El canciller argentino, Héctor Timerman, reveló que Argentina presentará ante la ONU un proyecto para que comiencen las negociaciones en la primera o segunda semana de enero, con un cronograma que incluirá tres encuentros, con expertos internacionales, organismos internacionales, para que luego quede redactado el primer marco legal para quiebras de países. “Se volvió a repetir el apoyo masivo de todos los países el mundo, y a la necesidad de que Naciones Unidas escriba, redacte y apruebe un marco regulatorio para que de una vez por todas sean todos los países los que decidan cómo se resuelven las deudas soberanas, y no solamente la justicia de un país o las decisiones a veces inentendibles de un juez”, subrayó Timerman. “Lamentablemente algunos de los países que deberían estar, porque son responsables con lo que ocurre deudas soberanas, se han dedicado a boicotear todo el proceso”, deploró.