Un atacante suicida detonó una bomba en una marcha de musulmanes chiitas en Pakistán y mató al menos a 43 personas, en el tercer ataque en tres días a comunidades minoritarias del país.

Más temprano, otro suicida mató a una persona más al inmolarse en una mezquita de otra comunidad musulmana minoritaria de Pakistán, donde la creciente violencia sectaria se suma a una insurgencia islamista y a catastróficas inundaciones en etapa de remisión. 

El ataque más letal de la jornada ocurrió en Quetta, en el suroeste paquistaní, donde un suicida activó explosivos que llevaba consigo durante una marcha de musulmanes chiitas en apoyo a la causa palestina, dijo el jefe de policía de la ciudad.