Un atacante suicida detonó una bomba en una mezquita en el noroeste de Pakistán, y al menos 50 personas murieron y más de 80 resultaron heridas, muchas de ellas aplastadas por el techo, informaron autoridades.

El atentado fue el último de una serie de ataques a mezquitas y templos de minorías religiosas en Pakistán, un país que ocupa la línea de frente en el combate global de Estados Unidos contra el islamismo y donde operan grupos como Al Qaeda y los talibanes.