Vecinos de la ciudad de Junín protestaron frente a la Municipalidad local para exigir mejores medidas de seguridad, tras el homicidio de la docente jubilada Olga Aída Acedo (74), el segundo crimen en seis días.

"Junín está triste" y "Basta, Basta, queremos seguridad" eran dos de los carteles que portaban los vecinos que se expresaron pacíficamente con aplausos frente a la sede comunal, donde el fin de semana pasado se registraron serios incidentes tras el homicidio de la kiosquera Karen Campos (17).

"No tenemos seguridad, esto no es nuevo, viene pasando desde hace mucho tiempo", dijo esta noche una mujer, cuyo hijo, a su lado, sostenía un cartel que decía "Quiero jugar en la vereda".

"Es muy triste lo que está pasando, hay una gran responsabilidad de la política, de la Justicia, de todos. Algo tienen que hacer, porque es una pena muy grande lo que le pasó a esta mujer", reclamó otro vecino.

Una mujer aseguró que "en la ciudad hay mucha droga, en las plazas, en las calles, especialmente en los menores de edad, y eso es lo que lleva después a que maten a la gente por nada".

En tanto, decenas de policías rodeaban esta noche los distintos edificios públicos, entre ellos el Banco Provincia y la sede municipal, pero no se registraron incidentes, ya que la gente se reunió alrededor de las 20.30 y se desconcentró a las 22.

Las máximas autoridades de la Policía bonaerense se hallaban en la comisaría local al frente de la investigación del nuevo homicidio y el jefe de la fuerza, Hugo Matzkin, recibió la orden del ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, de quedarse en Junín al menos hasta mañana.

Una vez conocido el crimen de la docente jubilada, las autoridades comunales ordenaron la evacuación de los edificios públicos y se suspendieron las clases en los establecimientos municipales, pero finalmente no hubo disturbios.