Ordenaron sacarle sangre a los familiares del nene
Es para descartar los ADN de quienes vivían con la víctima. El intendenrte de Miramar, Patricio Hogan habló con "La Mañana"
Una de las medidas que tomó ayer el fiscal Rodolfo Moure, quien investiga el crimen de Gastón Bustamante (12), fue ordenar la extracción de sangre de los familiares directos del nene y también de un vecino.
Se trata de clasificar los datos genéticos presentes en el lugar y descartar los ADN conocidos; por ejemplo, de quienes vivían con el chico”. Sin embargo, no se descarta ninguna línea de investigación .
El fiscal les había pedido a los familiares de Gastón que si descubrían que faltaba algo en la casa, se lo hicieran saber enseguida. Por eso, el papá del nene, carpintero, se acercó ayer a la fiscalía y contó que no encontraba uno de sus martillos.
Por eso, decenas de policías comenzaron a rastrillar la zona. A los pocos minutos, en un terreno lindante con la casa del nene, apareció la maza de un martillo, sin el mango.
El padre de Gastón reconoció que era suyo y ahora está siendo peritado. Gastón, antes de ser ahorcado con una media, había recibido un fuerte golpe en la cabeza. Aún no se determinó qué elemento se utilizó para atacarlo. El chico fue encontrado en el suelo, boca arriba, y había perdido mucha sangre. Sobre su cuerpo, los peritos también hallaron un cabello negro.
“Si ese pelo es de la familia, no hay problema. Es algo normal que este allí. En cambio, si no pertenece a ninguno de ellos, obtendríamos una prueba genética a futuro para cotejar con un eventual imputado” , afirmó la misma fuente.
La hipótesis principal del homicidio de Gastón sigue siendo el homicidio en ocasión de robo (faltaron trescientos pesos y en la casa estaba todo revuelto), aunque hay “líneas investigativas que no se pueden descartar por ahora” .
Gastón Bustamente, que el domingo había cumplido doce años, fue asesinado en la mañana del lunes en su casa del barrio Las Palmas. Según la causa, estaba solo en la casa. Su papá trabajaba y su mamá Verónica González había salido hacer compras. Cuando ella regresó, encontró al nene en el suelo, ensangrentado.
Salió a la calle y llamó a un vecino, Gustavo Páez, quien intentó reanimar al chico. Tenía un golpe en la cabeza y una media ajustada al cuello. “Estaba tan ajustada que no se la podía sacar”, contó el hombre.
La noticia conmovió al pueblo. Unas cinco mil personas marcharon en reclamo de justicia, en una manifestación pacífica. Cuando finalizaba, un grupo se desprendió y atacó a pedradas el edificio de la intendencia. Cuatro jóvenes, todos con antecedentes, fueron detenidos, acusados de daño agravado e incendio. También hay un menor imputado. Son los únicos detenidos.
Por el crimen, no hay por ahora sospechosos. Hubo dos demorados, pero fueron liberados por falta de pruebas. Sus huellas dactilares dieron negativo en el cotejo que se hizo con las que se encontraron en un aparato de tv. También se hallaron unas pisadas en el fondo de la casa. Pero por ahora los cotejos han dado negativos.
Fuentes de la investigación desmintieron la versión que circulaba anoche de que habían identificado huellas de un presunto ladrón. “La escena del crimen fue contaminada, en la confusión había mucha gente en la casa y eso hace difícil la pesquisa”, se lamentó un investigador del caso.