Un grupo de científicos ha confirmado el descubrimiento de una reserva de agua líquida en Marte, ubicada en las profundidades de la corteza del planeta. Este hallazgo se deriva de un análisis exhaustivo de los datos obtenidos por el Mars Insight Lander de la NASA, que aterrizó en Marte en el año 2018.

El Mars Insight Lander estaba equipado con un sismómetro que registró vibraciones en el planeta rojo durante un período de cuatro años, lo que ha permitido obtener información valiosa sobre la actividad sísmica marciana. A través del análisis de estos sismos, los investigadores han logrado identificar "señales sísmicas" que indican la presencia de agua líquida en el subsuelo marciano.

A pesar de que se ha encontrado agua congelada en los polos de Marte y se han registrado evidencias de vapor en su atmósfera, este es el primer hallazgo que confirma la existencia de agua en estado líquido en el planeta. Los resultados de esta investigación han sido publicados en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.

La misión científica del Insight concluyó en diciembre de 2022, tras cuatro años de operación en los que el módulo de aterrizaje permaneció en posición fija, registrando los sismos marcianos. Durante este tiempo, la sonda logró captar más de 1.319 temblores. A partir de los datos obtenidos, los científicos han podido determinar el tipo de material a través del cual viajan las ondas sísmicas, lo que ha permitido deducir la ubicación del agua.

El profesor Michael Manga, de la Universidad de California en Berkeley y uno de los participantes de la investigación, ha indicado que las técnicas empleadas son similares a las utilizadas en la Tierra para la búsqueda de agua, así como en la exploración de recursos como petróleo y gas. Estos análisis han revelado la existencia de depósitos de agua a profundidades que oscilan entre 10 y 20 kilómetros dentro de la corteza marciana.

El Dr. Vashan Wright, investigador principal del estudio y miembro del Instituto Scripps de Oceanografía de la Universidad de California en San Diego, ha enfatizado la importancia de comprender el ciclo del agua en Marte, ya que es fundamental para desentrañar la evolución del clima, la superficie y el interior del planeta. El profesor Manga también ha subrayado que el agua es una molécula crucial en la evolución planetaria, lo que plantea la interrogante sobre el destino del agua en Marte a lo largo de su historia.

Los estudios realizados sobre la superficie de Marte indican que, en épocas pasadas, existieron ríos y lagos en el planeta. Sin embargo, desde hace aproximadamente 3.000 millones de años, Marte ha permanecido como un desierto. Parte del agua pudo haberse perdido en el espacio tras la pérdida de su atmósfera. A pesar de ello, el profesor Manga sugiere que, al igual que en la Tierra, donde gran parte del agua se encuentra en el subsuelo, podría ocurrir lo mismo en Marte.

Los datos obtenidos por la sonda Insight solo se limitan a la corteza terrestre bajo su posición, por lo que los investigadores especulan sobre la posibilidad de que existan depósitos de agua similares en otras áreas del planeta. En caso de que se confirme esta hipótesis, se estima que la cantidad de agua líquida en Marte podría ser suficiente para cubrir la superficie con una capa de más de 800 metros de profundidad.

No obstante, es importante señalar que la localización de estas reservas de agua subterránea podría plantear dificultades para aquellos interesados en la colonización de Marte y en la explotación de estos recursos. Según el profesor Manga, esta agua se encuentra atrapada a profundidades de entre 10 y 20 kilómetros en la corteza, lo que representaría un desafío significativo incluso para iniciativas de exploración avanzada.

Finalmente, el descubrimiento de agua líquida en Marte también abre nuevas posibilidades para la búsqueda de vida en el planeta. Según el profesor Manga, "sin agua líquida, no hay vida", lo que implica que si existen entornos habitables en Marte, podrían estar ubicados en las profundidades del subsuelo.