Genera preocupación en la administración pública veneciana la llegaba a su pintoresca ciudad de una nueva costumbre italiana: los candados del amor”.
Se trata de candados que se cuelgan en lugares públicos y de los que luego se arroja la llave al agua, como representación de un sentimiento imperecedero. La costumbre comenzó en el mítico puente Milvio de Roma y, en su rápida difusión, ha llegado hasta el puente de la Academia y el de los Descalzos de ciudad adriática.

Las autoridades venecianas quitaron de inmediato los pendientes y advirtieron que no permitirán tal costumbre, pero la indignación burocrática creció cuando varios candados aparecieron en el celebérrimo puente de Rialto, el más antiguo de los que cruzan el Gran Canal.

“Estamos preparados para intervenir”, subrayó la directora de Decoro Urbano, Stefania Battaggia, quien enfatizó en el deterioro del a veces milenario patrimonio cultural italiano.

La costumbre se popularizó a partir del libro para adolescentes “Ho voglia di te” (Tengo ganas de ti), de Federico Moccia, que fue llevado al cine en 2006.