Desde el Peronismo Federal afirman que “construir quince establecimientos para alojar y contener a los menores que delinquen cuesta treinta millones de pesos, mientras que en publicidad se gastan mil quinientos millones”.

Por Continental, Gustavo Ferrari acusó a “la dirigencia política” de “no ocuparse de hacer cumplir la ley”.

El diputado denunció que “en la provincia de Buenos Aires faltan plazas de internación para recuperar a los jóvenes que delinquen”.

En Magdalena Tempranísimo, aseguró que “hay treinta y cinco mil denuncias, pero sólo ochocientas cincuenta plazas de internación”.

“El menor viene avisando permanentemente que va a cometer un delito. El Estado debería escuchar y no devolver a ese menor a los mismos ámbitos. Porque el menor va a volver a delinquir y en forma cada vez más grave”, aventuró.

“La falta de imputabilidad hace que los mayores se aprovechen de eso”, atribuyó.

“Hay un fracaso de la dirigencia política, que no se ocupa de hacer cumplir la ley. Hay leyes buenas, pero que no se cumplen. Construir quince establecimientos en la Provincia de Buenos Aires cuesta treinta millones de pesos. En publicidad gastan mil quinientos millones de pesos”, dijo, aunque no explicó si es en general o en particular sobre el tema (toda la pauta publicitaria que maneja el Estado nacional, ya no bonaerense, no supera los setecientos millones).

Y alertó que, actualmente, “las cárceles para los menores terminan siendo universidades del delito”.