Investigadores mexicanos descubrieron siete sitios mayas que habían permanecido ocultos hasta ahora en inmediaciones de la ciudad de Mérida, península de Yucatán, donde trabajaban para proteger el patrimonio arqueológico del crecimiento urbano.

Se trata de los sitios de Oxmul, Polok Ceh, Cuzam, Chan Much, Nichak, Tzakan y Chankiuik, donde los antropólogos hallaron estructuras de edificios, cerca de 75 tumbas y una serie de cerámicos. Localizados en un área de mil hectáreas dentro de la zona de Sitpach, los lugares "datan del periodo preclásico terminal (400 a.C.-200 d.C.), lo que cambia la cronología que se tenía para esta región maya", indicó el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

De esta manera se pudo corroborar que la región norte de Yucatán estuvo poblada desde el año 400 a.C. y no a partir del período clásico (200-600 d.C.) como se creía originalmente.