Conoció a Jorge Bergoglio poco después de que sus hermanas en la Congregación de las Misiones Extranjeras fueron secuestradas. Y a los 85 años decidió destacar públicamente la ayuda que recibió del hombre que se convirtió en el papa Francisco. 

"Bergoglio nos ayudó mucho, se ocupó del caso (de las monjas) y tomó contacto con la Embajada francesa ", señaló la religiosa que vive en la provincia de Misiones, donde es miembro honorario de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) y fundó un albergue estudiantil para hijos de colonos y guaraníes en Pueblo Illia.