Puerto Madero dignifica
En cualquier país serio del mundo, después de las denuncias del programa de Lanata, el gobierno se hubiera conmovido hasta sus cimientos. Sería un escándalo nacional y antipopular.
En cualquier país serio del mundo, después de las denuncias del programa de Lanata, el gobierno se hubiera conmovido hasta sus cimientos. Sería un escándalo nacional y antipopular. Legisladores oficialistas y opositores deberían exigir la presencia de Cristina en el Congreso para que de explicaciones. Es que la impunidad fue pornográfica. Ocultaron kilos y kilos de carpetas de pruebas de La Rosadita, la cueva de lavado del poder, gracias a la lentitud cómplice del juez de la causa. ¿No son motivos suficientes para el juicio político? Pregunto: ¿También pesaban las pruebas que destruyeron?
Cada día que pasa aparecen mas indicios y certezas. Cada día que pasa se confirman todas las denuncias. Solo los fanáticos de Cristina no quieren ver la megacorrupción a cielo abierto. La mafia de negociados con el estado que convertía coimas y retornos millonarios en propiedades y en millones de euros que luego de pesarlos, se ocultaban en bóvedas, los sacaban del país para blanquearlos en guaridas fiscales y en cuentas secretas en Suiza.
Todo gira alrededor de dos ejes geográficos: la provincia de Santa Cruz, cuna del matrimonio Kirchner y su cómplice Lázaro Báez y la financiera y cueva llamada no casualmente La Rosadita que está ubicada en el edificio donde la presidenta tiene dos departamentos y 8 cocheras y vive el vicepresidente Amado Boudou. Por si no queda claro, estamos hablando de las dos mas altas autoridades del gobierno. Las cámaras de seguridad del edificio mostraron a los empleados de Báez, como hormiguitas, sacando todo tipo de bibliotatos y archivos en changuitos de supermercados. Es la confirmación de la magnitud de los delitos.
La participación de Daniel Perez Gadín, contador de Lázaro, en la expropiación de La Rosadita y en la compra de campos en Uruguay y Mendoza por casi 20 millones de dólares en billetes contantes y sonantes es innegable. Los viajes a Suiza con Martín Báez, los cientos de mensajes intercambiados entre Elaskar y Nicolás Wiñasky durante 40 días son demoledores. Elaskar y Fariña temen ser asesinados y está claro que fueron amenazados en varias oportunidades. El valijero dijo ayer que a Elaskar, le habían baleado el auto dos veces. Estamos hablando de una asociación ilícita dedicada al lavado de euros que venían del caso mas grave de corrupción de estado registrado desde 1983 . Insólitamente, es una de las truchadas en donde mas pruebas hay. En un momento, Elaskar le dice a Lanata que lo banca como “todos los que estamos podridos de tanta mierda”. Pero, después de ser amenazado, ante la justicia acusó al periodista de golpista y de querer derrocar al gobierno.
Las mismas acusaciones falsas que hacen algunos chupamedias del cristinismo. Es increíble como el gobierno utiliza a sus voceros de cuarta pero simultáneamente, no dice una palabra en forma oficial. El silencio de Cristina es impactante. Actúa como si hablaran de otra familia y no del hombre que fue socio de Néstor, que compartió la última cena íntima antes de morir, que solía jugar el fútbol en su chacra y que edificó y custiodia el faraónico mausoleo en el que descansan sus restos. La gravedad y la profundidad del agujero negro corrupto del kichnerismo no debe hacernos perder el buen humor. Por eso pregunto con ironía y parodiando a la presidenta: ¿Quién fue el cómplice de Lázaro Báez? Multiple choise: San Martín, Belgrano o Néstor Kirchner.
La respuesta es de los oyentes. El que acierta se gana una botella del mejor Malbec de la flamante vinoteca de Lazaro. O un viaje a Suiza con escala en Panamá. O un vale para una visita al museo del modelo y la decada ganada en Madero Center. Ya se sabe: Calafate cumple, Puerto Madero dignifica.