Tras su debut en F1 en el GP de Italia, Franco Colapinto, se quejó de dolores “en todo el cuerpo”, y en parte lo atribuyó a la ‘dureza’ del asiento de carbono. 

Durante la carrera en Monza, que constó de 53 vueltas, Colapinto finalizó en el 12° lugar. A lo largo de esta competencia, el joven piloto tuvo que adaptarse a un asiento de carbono que, según su relato, es más duro de lo que estaba acostumbrado en su experiencia previa. Este tipo de asiento, aunque diseñado para ofrecer soporte y seguridad, puede resultar incómodo para un piloto que está en proceso de adaptación a los niveles de exigencia de la F1.

En la semana posterior a la carrera, el equipo Williams Racing ha estado trabajando en estrategias para aliviar la carga física sobre Colapinto. Se ha mencionado que el equipo está considerando ajustes en el asiento para mejorar la comodidad del piloto durante las carreras. 

Por su parte, el bicampeón mundial de F1, Fernando Alonso, en cuyo equipo compitió dentro de la F4 Española, ofreció recomendaciones a Colapinto, instándolo a que se prepare adecuadamente para las próximas competencias. El asturiano destacó que Colapinto realizó una buena carrera y que, a pesar de ciertos dolores en la espalda, mantuvo un rendimiento sólido sin cometer errores significativos, y le aconsejó que “estrene” en los días que le quedan hasta el GP de Azerbaiyán. 

La carrera se disputará en el callejero de Bakú, con muchas curvas cerradas, pero también con secciones de altísima velocidad. La combinación de fisioterapia y el apoyo del equipo será fundamental para que el piloto argentino pueda afrontar de la mejor manera los retos que presenta el próximo trazado en Bakú, uno de los ocho que le quedan a la F1 2024, que se pone cada día más linda ante la debacle de Red Bull y el ascenso de McLaren, Mercedes y, en las últimas dos carreras, Ferrari.