“Chenga” Gómez negó haber tenido un hijo con Marita Verón
"Es imposible tener un hijo con una persona a la que no ví nunca en mi vida", señaló Gómez tras hablar por primera vez ante el tribunal tucumano, algo que había rechazado en el inicio del juicio.
José "Chenga" Gómez, uno de los 13 imputados en el juicio por la desaparición de Marita Verón, se declaró inocente y negó haber tenido un hijo con la joven, que desapareció víctima de una red de trata en 2002.
"Es imposible tener un hijo con una persona a la que no ví nunca en mi vida", señaló Gómez tras hablar por primera vez ante el tribunal tucumano, algo que había rechazado en el inicio del juicio.
Con tono pausado, el imputado dijo estar preparado para responder a las acusaciones y rechazó las afirmaciones de Susana Trimarco, quien en las jornadas anteriores sostuvo que Marita Verón tuvo un hijo producto de una violación por parte de Gómez.
"Vine a buscar la verdad, pero ante la sociedad dejaron entender que somos unos monstruos y me duele cuando hablan de la mafia de los Gómez", indicó.
"Los Gómez somos mi hermano y yo, nadie más, y no somos mafiosos", dijo el acusado.
"Chenga" admitió que él y su hermano tuvieron "una vida muy difícil", pero aclaró que "no estoy arrepentido de ser hijo de Liliana (Irma) Medina", también imputada en la causa por la desaparición de Marita Verón.
"Al contrario -señaló-, me siento orgulloso de la forma en que mi madre me crío más allá de su decisión, errónea o no, de vender su cuerpo para poder sustentar lo que nosotros necesitábamos".
Gómez, su hermano y su madre están acusados de administrar un local en La Rioja, donde supuestamente fue llevada Marita Verón para ser obligada a ejercer la prostitución.
Trimarco afirmó que "Chenga" decidió que Marita sea su mujer, la violó y como consecuencia de eso nació un hijo cuyo paradero se desconoce.
Según Gómez, su madre "pensaba darnos algo mejor", y recordó que cuando fueron a La Rioja trabajaba en casas de familias, pero con lo que ganaba no le alcanzaba.
"Ahora escucho que se habla de violación, de maltrato, que somos unos delincuentes. Sólo les pido que averigüen en todo el país si yo tengo un frondoso prontuario como se dijo", indicó.
Durante su relato, Gómez resaltó que "sólo se escuchan dichos mentirosos de esas mujeres porque no soy un golpeador ni un mafioso y tampoco conocía ni a los Ale, ni a Rivero ni a Andrada".
"Chenga" contó que sus hijos no quieren ir a la escuela por la situación que está viviendo y admitió que "me cuesta decirles que bajen la cabeza y vayan", aunque se mostró convencido de que "voy a demostrar que no soy la persona que dicen".