Oscar Piastri ganó el Sprint de Catar de F1, tras una competencia anodina controlada por los dos McLaren, sólo animada por los intentos de Russell de atacar al australiano y los de Sainz Jr por superar al joven británico. Todo coronado por un final alla Ferrari en la era Schumacher-Barrichello: Lando Norris, que había liderado toda la carrera con la fusta bajo el brazo, levantó en la última curva de la carrera para dejar ganar a Piastri y devolver un favor de cuando Lando peleaba el Campeonato de Pilotos con Verstappen; propiamente, lo que se llama ‘justicia salomónica’. 

Para McLaren todo fueron sonrisas, pues con el 1-2 sumaron 15 puntos, contra los 9 que acumuló Ferrari merced a Sainz Jr y Leclerc (cuarto y quinto). Se juegan entre los dos equipos muchos millones de dólares a recibir el año que viene. 

Max Verstappen sólo pudo rascar un puntito, tras superar a Gasly, y después ni siquiera le pudo recortar distancia al asombroso Haas de Hülkenberg. Hamilton terminó sexto, silbando bajito tras las Ferrari. 

En cuanto a Checo Pérez, perpetró otra actuación infame: largaba desde el pitlane; por razones desconocidas, se quedó clavado cuando el semáforo de la calle de Boxes se puso en verde (Colapinto tuvo que esquivarlo); después rompió el alerón delantero y tuvo que entrar a Boxes a cambiarlo; y para coronar esta negra jornada, terminó último cómodo. 

Colapinto, como se dijo, largaba último y desde el pitlane. Pudo superar a Checo en la largada y después a Zhou (que también tuvo que entrar a Boxes). Y, con una versión de auto más actualizada que la que utilizó ayer, mostró un ritmo esperanzador, de cara a la Qualy y la Carrera, antes de quedar atrapado en el trencito soporífero que concita este circuito de Lusail, pensado para la Moto GP y que le queda como un corset a la F1.

La actividad de la F1 sigue a las 15 de la Argentina, con la Clasificación. Y el domingo a las 13 se correrá el Gran Premio de Catar, con relatos de Lonchi Legnani y el equipo Campeones desde Catar, por Continental.