Se complicó la estrategia de Sergio Schoklender para deslindar su responsabilidad en el manejo del dinero de la fundación Sueños Compartidos, de las Madres de Plaza de Mayo.

El fiscal del caso le entregó al juez federal Norberto Oyarbide un documento firmado por Hebe de Bonafini en el que la presidenta de la ONG le cede al ex apoderado el manejo de la administración y las finanzas. Así, se cae el argumento de Schoklender que le endilgaba el manejo del dinero de las viviendas a la tesorera de las Madres, que tiene noventa y seis años.

En tanto, los fiscales y el juez analizan el incremento patrimonial de los hermanos y a través de qué mecanismos pueden haber derivado fondos. En el Juzgado y también en Madres consideran que la clave está en los cheques que se cambiaron por efectivo en financieras.